Si alguien nos preguntara cuál fue el primer milagro que efectuó Jesús, no dudaríamos en contestar que transformó el agua en vino a lo largo de una celebración de bodas en la localidad de Caná de Galilea.
El primer milagro de Jesús en las bodas de Caná solo está contado en el Evangelio de Juan:
Tres días después había una boda en Caná de Galilea y la madre de Jesús se encontraba allí . Jesús y sus acólitos asimismo fueron convidados a la boda. Se terminó el vino y la madre de Jesús le ha dicho: «No tienen vino». Jesús le afirma: “Mujer, ¿qué tengo yo contigo? Aún no llegó mi hora”. Su madre les afirma a los sirvientes: “Hagan lo que él les afirme”. Había seis tinajas de piedra para la purificación de los judíos, todas las que contenía en torno a cien litros. Jesús les afirma: “Llenad las tinajas de agua.” Y las llenaron hasta el borde. Entonces les afirma: “Sáquenlo en este momento y llévenselo al maestresala.” Ellos se lo llevaron. El maestresala probó el agua transformada en vino, sin entender de dónde venía (los sirvientes lo sabían por el hecho de que habían sacado el agua), y después llamó al hombre y le ha dicho: «Todos ponen primero el buen vino, y en el momento en que se bebe, lo malo; Tú, en cambio, has guardado el buen vino hasta la actualidad». Esta fue la primera de las señales que logró Jesús en Caná de Galilea; de este modo descubrió su gloria, y sus acólitos creyeron en él. (Juan 2:1-11)
Conclusión
Alén del contexto simbólico del agua, el vino y las historias de referencias que cuenta el capítulo, nuestro Señor Jesús respondió a la solicitud de María, con lo que es bueno y misericordioso, y tal como respondió al pedido de su madre, asimismo respondió a otros pedidos, como disponemos ocasión de leer en los Evangelios: curaciones, milagros, echar fuera diablos, entre otros muchos; pues el Señor responde a los que le procuran en espíritu y de hecho. Consecuentemente, es erróneo sospechar que los católicos toman este pasaje como una referencia a la presunta intercesión de María sobre una base bíblica. Si de esta forma fuera, asimismo deberían buscar la intercesión del fariseo que suplica por su hija fallecida, la mujer cananea que suplica por su hija atormentada por los diablos, el ciego, el cojo, el paralítico, a quien Jesús asistía y le rogaba. sus nosologías. Lo preciso es, como todos, proceder a Cristo.
Paz.
Conclusión
Alén de la conexión simbólica del agua, el vino y las referencias históricas que cuenta el capítulo, nuestro Señor Jesús respondió a la solicitud de María por el hecho de que es bueno y misericordioso y tal como respondió a su solicitud de la madre, respondió asimismo a otras necesidades, como tenemos la posibilidad de leer en los Evangelios: curaciones, milagros, expulsión de diablos, etcétera.; pues el Señor responde a los que le procuran en espíritu y de verdad. Con lo que es erróneo sospechar que los católicos toman este pasaje como una pista para tener como base bíblica la presunta intercesión de María, de ser de este modo, habría que soliciar asimismo la intercesión del fariseo que solicita por su hija fallecida, la cananea que rogaba por su hija atormentada por los diablos, los ciegos, los cojos, los lisiados, que asistió a Jesús pidiendo por sus sufrimientos. Lo preciso es realizar lo que cada uno hizo, debemos proceder a Cristo.
Paz.
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