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¿Dónde vive Atenea?

El Partenón es un templo heleno en la Acrópolis de Atenas y destinado a la diosa Atenea. Se considera entre las construcciones arquitectónicas mucho más preciosas de la raza humana.

Athena, asimismo famosa como Pallas Athena, es la diosa griega de la sabiduría, la estrategia, las artes, la justicia y la capacidad. Tenemos la posibilidad de decir que se encuentra dentro de las primordiales deidades del panteón heleno, y asimismo se encuentra dentro de los 12 dioses olímpicos.

Atenea y los Héroes

Asistió a múltiples héroes por los que sentía simpatía, como Perseo en su pelea contra la gorgona Medusa (si no fue ella quien la decapitó) y en la Hallar la cabeza (Gorgonion) en su égida.

ella por su parte resguardó a Odiseo y también intervino en la guerra de Troya representando a los helenos.

Curiosidades del Partenón

Nuestro Partenón almacena pequeños misterios que te encantarán aún mucho más en el momento en que los te des cuenta. Hagamos un paseo por las extrañezas de él.

  • ¿Te has fijado en sus columnas? Sus diseñadores los hicieron mucho más anchos en la parte de abajo y mucho más estrechos en la parte de arriba, haciéndolos parecer mucho más altos merced a la visión desde abajo. Su diseño con franjas verticales asimismo quiere ofrecer cuerpo y volumen a las columnas. Están levemente arqueados en el medio para ofrecer a la visión del templo una mayor sensación de seguridad y equilibrio.
  • ¿Sabías que ninguna línea del Partenón es totalmente curva? O sea para atenuar el encontronazo visual y ofrecer la impresión de que el edificio es mucho más rápido, menos material y mucho más efímero.
  • Está a la perfección construido acatando la geometría sagrada y el número phi.
  • Sus mármoles proceden de la mejor mina de mármol de Europa. Penteli estuvo proveyendo mármol a Ática a lo largo de mucho más de 2000 años. El día de hoy está cerrado y su mármol está guardado para la restauración de los santuarios de la Acrópolis.
  • Otra cosa que increíblemente poca gente sabe sobre el Partenón es que no era blanco. Sus columnas y frisos estaban llenos de color. Azul, colorado, verde y dorado llenaron de vida las canicas pentélicas. Puedes procurar imaginarlo, en su perfección armoniosa y cubierto de color. Quizás empieze por entender su tamaño.
  • Sus argumentos son cero. Como es natural, tiene cimientos que la sostienen al suelo, pero la Acrópolis está «hueca» por la parte interior. Sus varias grutas tienen especialistas de todo el planeta preguntándose de qué manera un edificio ha subsistido a lo largo de tanto tiempo. Grecia no es Chile en lo que se refiere a terremotos, pero asimismo es un país sísmico donde cada cierto tiempo poseemos sismos que sobrepasan los 4 grados.
  • En la Guerra de la Independencia, en el momento en que el pueblo heleno se rebeló contra los turcos en 1821, el templo fue personaje principal de entre los capítulos mucho más recordables. Resulta que en entre las peleas atenienses los turcos se han quedado sin municiones. Todavía siendo dueños del territorio, eligieron demoler el Partenón para hacer mucho más. Los aterrorizados helenos ofrecieron al enemigo sus balas en lugar de dejar en paz la vivienda de Atenea. Los turcos admitieron y merced a eso todavía lo disponemos como está.
  • Lord Byron se enamoró de él, en verdad fue entre los enormes contrarios a la apropiación por la parte de Inglaterra de los Mármoles del Partenón. Para probarlo escribió la “Maldición de Minerva” donde la versista, usando su nombre en latín, sostiene una charla con la diosa Atenea, quien condena el hurto y permanencia de los mármoles fuera del territorio helénico y culpa al creador de tal hurto. .
  • ¿Sabías que hay una réplica prácticamente precisa del Partenón en USA? Está en Nashville, Tennessee. Te dejó una fotografía a fin de que la gozes.

En 1827

abandonó el país con su familia tras la promulgación de un decreto de expulsión de los españoles. Se establecieron en la localidad de españa de Valencia.

regresó con su familia a la localidad de San Luis de Potosí, donde logró negocios.

Acto III: La llegada de Labres

Según los mitos, Athena afirma que de todos modos aguardaron a Labres. Sabían que Labres aparecería en algún momento pues Labres amaba el derramamiento de sangre y muchas peleas se habían librado en su campo. Labres se vio obligado a ver mucho más allí.

Ciertamente, un día vieron al enorme dios Labres en su campo. Le lanzaron piedras. Tuvieron bastante fortuna de que una de sus rocas golpeara a Labres, dejándolo inconsciente antes que Labres se diese cuenta de lo que hacían. Los chicos velozmente metieron a Labres en un jarrón enorme y cerraron la tapa.

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