El verano ahora está aquí y si aún no has decidido dónde pasar tus vacaciones, es hora de hacerte la enorme pregunta:
¿Mar o montaña?
Cadaqués
Cadaqués es un viejo pueblo de pescadores que ha preservado su encanto y luce por sus viviendas blancas, sus calles angostas y sus navíos pesqueros descansando sobre la arena de sus calas. Cadaqués, santuario de Salvador Dalí adjuntado con la vecina ciudad de Port Lligat, es una apuesta segura, y mucho más si te mencionamos que está cercada por el bello paisaje del Parque Natural del Cap de Creus, un genuino espectáculo para los Sentidos. Para no perderte nada de la región, te aconsejamos que prosigas esta lista de sitios que conocer en Cadaqués y degustes los exquisitos platos de varios de los mejores sitios de comidas de Cadaqués, como el lugar de comidas La Talla y el lugar de comidas Comunicar, nuestros preferidos.
Si dispones de sobra tiempo, aparte de conocer la localidad, puedes realizar una ruta de senderismo hasta el Faro de Cala Nans o el Faro de Cap de Creus, atravesando hermosas calas y panoramas desgastados del Cap de Creus Natural conduce parque. de Creus.
Montserrat
El macizo de Monsterrat es un espacio natural único y es indudablemente entre los sitios mucho más hermosos de Cataluña. Más allá de que su cercanía a la ciudad más importante la convirtió en un destino bastante turístico, no ha perdido su magia y todavía es entre los símbolos de la identidad catalana. Estuvimos en Montserrat frecuentemente, pero sus rocas de formas especiales, sus vertiginosas paredes verticales y las increibles vistas que se tienen la posibilidad de gozar desde los puntos mucho más altos; Siempre y en todo momento nos sorprenden.
Además de esto, Montserrat es un destino especial que combina la naturaleza con una visita cultural, puesto que es el centro espiritual de Cataluña. Tanto el Monasterio de Santa María de Montserrat como todas y cada una de las pequeñas ermitas ocultas en diferentes puntos del macizo meritan tu atención.
Vilassar de Mar: modernismo y vermut
La comarca del Maresme se encuentra dentro de los patios de recreo de los barceloneses, pero una enorme ignota para los pasajeros de fuera de Cataluña que acostumbran a atravesar su costa por el norte -II en el sendero a la Costa Brava. Sin embargo, vale la pena conocer los pueblos ribereños, especialmente Vilassar de Mar, entre los pueblos con mucho más tradición marinera del Maresme. Guarda un rico y riguroso patrimonio arquitectónico que incluye bellos inmuebles modernistas construidos por originarios americanos que retornaron de América.
Cualquier recorrido por la localidad debe pasar por el edificio Sènia del Rellotge, obra del arquitecto Eduard Ferrés i Puig, que en este momento aloja el Museo de la Marina. Tampoco pasan inadvertidos los datos ornamentales de Cal Pigat, el Casal de Curació, la Escola Nàutica, los palacios del Enorme Chaco, Perro Bisa y el Xalet d’Hilari Marimon. Y prosigue la ruta y revela las villas de veraneo de estilo modernista que adornan el sendero de Sant Pau que discurre al lado de la N-II. Allí está entre las tascas mucho más populares de la provincia, l’Espinaler, donde es indispensable el popular vermut y una lata de conservas.
Cala Trons, una cala en Lloret de Mar
Entendemos que todos conocen la Costa Brava. Pero hay rincones que aún están «inexplorados» o no tan populares como otros. Es la situacion de Cala Trons en Lloret de Mar, una cala situada entre frondosos barrancos y que proporciona un fondo marino idóneo para conocer llevando a la práctica snorkel.
Se encuentra dentro de las calas mucho más íntimas de esta una parte de la Costa Brava. Para llegar hay que tomar el Sendero de Ronda o llegar en turismo. En este otro producto te descubrimos las mejores calas cerca de Barcelona por si acaso no deseas desplazarte bastante de Barcelona.
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