Los psicólogos aseguran que esta clase de fobia está causada por otros temores: temor a los espacios cerrados, temor a las alturas, temor a un incidente mortal o vivencias traumáticas socias a los vuelos en avión.
Entonces, ¿de qué forma puedes entrenar para perder el temor a tu próximo viaje?
Simple, haz un viaje de fin de semana a un pueblo o localidad cerca de donde vives sin teléfono ni PC.
No investigues por adelantado, solo di: «Me marcho de viaje a un espacio como este» y listo
¿De qué forma puede asistir la terapia sicológica con la fobia a viajar?
Los psicólogos llevan múltiples décadas aprendiendo y intentando este género de fobia concreta, clasificadas como trastornos de ansiedad.
El paso inicial para tratar exitosamente la fobia a viajar es ponerse a cargo de un sicólogo que se titula, predominantemente experto en efectuar una intervención multidimensional que integre las próximas tácticas terapéuticas.
Las buenas novedades no van en los jornales (salvo que sean bastante poco comúnes)
Por servirnos de un ejemplo, esta historia debería haber aparecido en la primera plana de un periódico de Malasia… «Ella era una pequeña perdida en Asia prestando asistencia a una familia indonesia”
Antes de irme de Buenos Aires sabía que aparte de viajar deseaba dedicarme a romper prejuicios. Siempre y en todo momento me sonó utópico y también idealista, pero aún el día de hoy prosigo firmemente puesto en compromiso con esta misión de enseñar que «Blanco», «Negro», «Asiático», «Musulmán», «Judío», «Hombre», «Mujer» no no nos hace «buenos» o «pésimos», «mejores» o «peores». Con eso no deseo decir que la gente malas (o el mal mismo) no existan, como es natural que hay y están en todas y cada una partes en el planeta. planeta (todos somos una mezcla del bien y del mal.) No es necesario que les recuerde que todos y cada uno de los días pasan cosas horribles: hay guerras, matanzas, hurtos, homicidos, raptos, torturas, violaciones, injusticias y cientos de hechos vergonzosos contra nosotros como clase. Pero semeja que necesito recordarles que un millón de cosas buenas suceden en el medio, con lo que puede concentrarse en ver solo lo malo y jamás estimar salir de su casa, o puede concentrarse en ver (y traer adelante) buenas proyectos traer) y admitir que predominan la amabilidad y la hospitalidad.
Planea cada aspecto del viaje
conoce dónde reposar, dónde comer, qué autobuses vas a tomar, los horarios y costos de las atracciones. Al fin y al cabo, es esencial que poseas claro cada punto de tu viaje. Transcurrido un tiempo vas a dejar de inquietarte tanto y vas a llegar a las ciudades sin reservas y todo va a ser lo mucho más habitual de todo el mundo.
No comprender dónde reposar puede ser un enorme inconveniente para bastante gente. Es esencial que reserve su hospedaje la primera oportunidad para eludir sentirse abrumado por la indecisión. O quizás te entra el caos en el momento en que llegas al primer albergue y está totalmente lleno. Transcurrido el tiempo vas a llegar a las ciudades y vas a pasar por distintos hospedajes para poder ver cuál te es conveniente mucho más y lo escogerás en el instante.
¿Cuáles son los síntomas?
Como todas y cada una de las fobias, la hodofobia o temor a viajar actúa con síntomas sentimentales, cognitivos y físicos muy heterogéneos. Observemos los más habituales.
Manifestaciones sentimentales
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