Las medusas son alimento para otros animales marinos. Estos tienen dentro otras medusas, anémonas, pingüinos, tortugas marinas y peces como el atún, los tiburones y el pez espada.
Con la llegada del verano, las playas se llenan de bañistas que procuran refrescarse pero que de manera frecuente deben confrontar a una desapacible compañera: las medusas. Con temperaturas del mar poco a poco más altas, se reportan mucho más casos de picaduras de medusas todos los años, pero un estudioso probablemente halla encontrado la clave para eludir sus picaduras merced a otra criatura marina: el pez payaso.
Hablamos de una crema que repele las mordeduras de estos animales (cuya toxicidad cambia de una clase a otra logrando aun ocasionar un shock anafiláctico y la desaparición) y, según su constructor Amit Lotan, asimismo actúa como un asegurador del sol
Aves
Muchas aves se han aprovechado de la proliferación de medusas por la costa, como las gaviotas. Las gaviotas son omnívoras, lo que quiere decir que comen de todo. Si bien tienen la posibilidad de ser atacados por su veneno, por norma general atacan las áreas seguras de las medusas, o sea, su campana, picotean y gozan de cada mordisco pero van de los tentáculos sin comer.
Otras medusas asimismo tienen la posibilidad de agredir a una medusa mucho más pequeña
¿Qué comen las medusas?
Como comentábamos al comienzo del producto, las medusas del Mediterráneo se nutren de plancton animal. En el «menú del día» asimismo poseen otros alimentos. Asimismo pertenecen a su dieta pequeños crustáceos, ciertos pececitos y/u otras especies de medusas. Ver a través del cuerpo de la medusa su última atrapa antes de ser digerida es bastante extraño.
Una publicación de Tim Samuel (@_timsamuel)
¿Qué género de mordida generan y por qué razón?
Como se mentó previamente, las medusas tienen células urticantes con un mecanismo que provoca que el veneno sea inoculado al contacto con presas potenciales o con un viable depredador o amenaza. En dependencia de la clase, hay enormes diferencias en el nivel de peligrosidad; Ciertos no son venenosos, al tiempo que otros tienen la posibilidad de ocasionar mordeduras increíblemente graves. Por este motivo, y dada la contrariedad de distinguir las diferentes especies, es conveniente no arrimarse, y bastante menos tocar, a una medusa. Aun una vez que una medusa haya fallecido, sus tentáculos tienen la posibilidad de proseguir inyectando veneno por un tiempo. Entonces, si podemos encontrar una medusa en la playa, no debemos tocarla. Asimismo tienes que eludir bañarte en zonas donde se hayan divisado medusas (acostumbran a acumularse en ciertas zonas en dependencia de las corrientes, vientos y oleaje).
El primer efecto de la picadura de una medusa es una sensación de picor, mal y también inflamación en la región perjudicada. La gente débiles y los pequeños son mucho más propensos a las mordeduras. En personas en especial sensibles, los efectos de las picaduras tienen la posibilidad de ser realmente graves.
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